31.7.09

SOPORTE MATERIAL

...y ya escrito el poema,
ya bien pasado en limpio,
cuando ya eliminamos
borraduras y atajos,
detenerse.
Tomar entre los dedos
una de las esquinas de la hoja
y retirarla suavemente,
al contrario de como se retira
el mantel repentino
sin que las copas caigan.
Hasta que el poema quede
flotando sin papel sobre la mesa.

Entonces hay que abrir la ventana
y que el aire deshaga lo que quiera

EDUARDO CASAR