Si hoy me fuera a morir, me moriría
con tu salud de brisa en el sombrero,
con el sábado manco de un minero
asalariado de melancolía.
Si hoy me fuese a morir me marcharía
desempleado a la muerte en que me espero,
me saldría del gris de tu ropero
con overol de yerba a la agonía.
Si hoy me fuera a morir, me alegraría
de esta ropa parchada, de esta fama
que dejara en mis pies la lejanía.
Rompiera el telegrama, y partiría
dejándole a la muerte la piyama
de esta voz que en la piel me contenía.
JUAN BAUTISTA VILLASECA